Después de tratar de saber, por
curiosidad, si existía alguna relación de la Biblia con la Cábala, inicié a
sumar los números de las palabras de los primeros seres creados en el Génesis.
Inmediatamente encontré que había una relación precisa de estos nombres con el
significado de las esencias de la Cábala. Después traté de encontrarla también
en fragmentos de los versículos, en los que me resultaban más representativos,
pero no les encontraba significado que estuviera relacionado con el
conocimiento de la Cábala. Después de repetir este método por varios de los
Libros de la Biblia sin resultados satisfactorios, fue hasta que sumé los
números totales de cada versículo, que encontré la existencia de una relación
precisa del significado de su expresión en su sentido literal con el
significado en Cábala de la suma de sus números. Encontré que el sentido literal
correspondía, estaba relacionado razonablemente con el sentido numérico, y que esta relación se repetía con todos y cada
uno de los versículos, incluyendo capítulos completos, como los del Arca de Noé, #35, el cual se repite al sumar los números del total de los versículos de sus capítulos 6 al 9 del libro del Génesis. Entonces
me convencí plenamente de que la
relación numérica no se encontraba solamente en las palabras de los
protagonistas del Génesis y de otros Libros de la Biblia, que había encontrado el
Código Numérico o lenguaje alterno con el que fue escrita la Biblia para
ocultar los grandes secretos del conocimiento religioso antiguo, el más
antiguo, el de la creación original, hasta los tiempos finales.
Para interpretar numéricamente deben
sumarse los números correspondientes a las letras de cada palabra. El
resultado, la suma de ellos, se reduce a un solo número, por ejemplo, Jehová, #
42=6, número de la esencia del ser humano equilibrado original. La suma del
total de números de las palabras de cada versículo se reduce de nuevo a uno o
dos dígitos que comprendan máximo hasta el número 22, el nivel mayor de la
Cábala, por ejemplo 367=97=16=7, esencia del cambio, energía producida por el
choque de dos sonidos equilibrados. Este número correspondería al significado
de alguna de las esencias que forman parte de la Cábala de alguno de los
versículos. Para interpretar numéricamente debe respetarse la equivalencia
numérica de toda letra, esto significa que la A siempre es 1, la D es 4, la M
es 13, la U es 22, etc. Esto para no modificar intencionalmente el significado
numérico tratando de crear resultados convencionales. Obviamente que al sumar
los números de las palabras en idiomas diferentes, cambian tanto el valor como
el significado numérico. Es por este motivo que la enseñanza numérica o
cabalística de la Biblia puede ser verídica solo en un idioma, y que para
corroborar esta condición debe conocerse
a la perfección la verdadera Cábala. Se eligió el idioma Español para expresar
el sentido numérico con el que fue escrita la Biblia debido a la similitud de
la manera como deben pronunciarse los
sonidos de la Cábala y como se pronuncian los sonidos en Español. La
similitud radica en lo siguiente: en Cábala todos los sonidos tienen un
potencial activador y creador cuando se les asocia en perfección para que
puedan adquirir una vibración que sea específica para la finalidad también
específica. Para que los sonidos puedan cumplir esta función es necesario que
las letras que las integran deban pronunciarse exactamente como se escriben,
tal como se hace en el idioma Español.
A continuación se exponen algunos
ejemplos de interpretación numérica de versículos del Génesis.
Capítulo
1:10 Y llamó Dios a lo
seco Tierra, 33=6 y a la reunión de las
aguas llamó Mares. 47=2 Y vio Dios que era bueno. 34=7 Total, 114=24=6, el equilibrio de la
superficie de la Tierra. Tierra, # 47=11=2, y Mares, # 58=13=4, 2+4=6.
Debido a que el universo y el ser humano
fueron creados originalmente con los mismos principios funcionales, este número,
el # 6, se atribuye también de manera genérica al SER HUMANO ORIGINAL. Esta condición de
equilibrio se ubica en la superficie de las formas circulares, las formas con
las que se creó todo lo que existe, desde la superficie del nivel atómico,
permite la difusión de energía hacia el interior y hacia el exterior para
sostener el nivel de creación.
Capitulo
1:26 Entonces dijo Dios.
Hagamos al hombre a nuestra imagen, 38=2
conforme a nuestra semejanza; 13=4 y señoree en los peces del mar, 31=4
en las aves de los cielos, 40=4 en las bestias, 22=4 en todo animal que se
arrastra sobre la tierra. 50=5 Total, 216=36=9, LA PALABRA EQUILIBRADA,
proporcional al número de hombre, # 63=9.
Imagen, # 49=13=4, + Semejanza, #
89=17=8, 4+8=12, números de Ser, # 44=8, Viviente, # 67=13=4, 8+4=12. La imagen
y semejanza con Dios se establece originalmente con el ser humano equilibrado
en perfección, # 12, el que podía sostener su equilibrio y su pureza por medio
de su palabra equilibrada, # 9.
Capítulo
2: 7 Entonces Jehová
Dios formó al hombre del polvo de la tierra, 65=2 y sopló en su nariz aliento
de vida, 56=2 y fue el hombre un ser viviente. 44=8 Total, 165=75=12. La
creación original del ser humano fue en estado de EQUILIBRIO EN PERFECCIÓN, el
nivel de desarrollo que permite hacer un uso digno del libre albedrío porque su
conocimiento puro les permitía conservar por sí mismos el equilibrio y la
pureza por medio de la creación de sonidos equilibrados, y porque el desarrollo
de sus 12 conductos les permitía sentir y tomar la pureza y las energías
vitales del universo. Hombre, polvo, nariz y sopló tienen un mismo valor
numérico, # 9, la palabra equilibrada. Esto significa que el ser viviente, al
ser creado de polvo, # 9, de tierra, # 11, fue creado por medio del conocimiento
puro, # 11, de la palabra, # 9, el cual es el conocimiento de la Cábala.
Capítulo
2:9 Y Jehová Dios hizo nacer de la tierra todo
árbol delicioso a la vista, 63=9 y bueno para comer; 9 también el árbol de la
vida en medio del huerto, 56=2 y el árbol de la ciencia del bien y del mal.
51=6 Total, 179=89=17=8 La creación de
LOS SONIDOS DEL UNIVERSO, # 8, por medio de la palabra, # 9. Oriente, # 89, la
salida del sol, el nacimiento de alguna función pura.
Árbol delicioso, 50+94=144=9, la palabra
equilibrada en perfección. El árbol de la vida= 29=11, el conocimiento puro,
ambas esencias son parte del desarrollo de un ser humano equilibrado en
perfección, # 12. Árbol y vida, 5+7=12,
el sistema funcional integrado en pureza entre el cerebro y los órganos genitales
del ser humano equilibrado. Árbol de, bien y mal, 3+8=11, el conocimiento
deformado del ser humano. Árbol y ciencia bien y mal= 24=6, el conocimiento del
ser humano que se ha deformado por ser una mezcla del bien y del mal.
Un 8, sonidos del universo, y un 9,
sonidos de la palabra, equilibrados, son producidos por un sistema planetario y
un ser humano equilibrados, son las condiciones de una creación original, donde
florece el árbol de la vida, el sistema funcional puro de la mente de un ser
equilibrado nivel 12, el que puede activar su cerebro mediante la energía
producida por el choque de los sonidos 8 contra 9. Al perderse el equilibrio de
8 y de 9, inducido por el desequilibrio planetario, impera el simbolismo del
árbol del bien y del mal, porque se añade lo malo a la energía que circula
entre el cerebro y los órganos genitales.
Capítulo
2:22 Y de la costilla que Jehová tomó del hombre,
51=6 hizo una mujer, 24=6 y la trajo al hombre. 21=3 Total, 96=15=6, LA
CREACIÓN DEL SER HUMANO EQUILIBRADO. Mujer, # 69=15=6. Costilla, # 94=4 y Adán,
# 20=114=24=6.
Las palabras o sonidos que emitían los
primeros seres humanos, antes que existieran las lenguas, estaban estructuradas
funcionalmente en perfección para producir y tomar la energía de dichos sonidos.
Podían sentir todos los sonidos que existían, incluyendo el que producían los animales,
podían sentir su esencia proyectada en los sonidos que producían. Fue así como
la palabra mujer se creó originalmente relacionándola con los sonidos producidos
por el animal que muge, porque reproduce los sonidos del equilibrio. Por esta
relación, al ser humano que había logrado el desarrollo de su equilibrio
mediante el dominio de estos sonidos, los que emite el animal que muge, los
cuales se manifiestan en su mansedumbre, se le llamaba mujer sin importar su
género masculino o femenino. En la serie de nombres de la línea de los
primogénitos, regularmente no aparece el nombre de las mujeres con las que se
unen para procrear, esto significa que les era posible crear, crear sus propias
esencias, por medio de su palabra y su conocimiento, porque habían alcanzado el
nivel de mujer, el de un ser equilibrado y puro, un nivel que es sagrado dentro
de la creación porque les permitía
sostener y aumentar su nivel de desarrollo. Esta enseñanza bíblica,
malinterpretada en conjunto con otros versículos, derivó en el menosprecio y en
el desprecio religioso hacia la mujer; y esta misma enseñanza, pero en los
libros de los Vedas, derivó en otra gran deformación del conocimiento
religioso, el de relacionar la condición de la creación de los animales con lo
sagrado de la creación dual original del ser humano. La condición de
inferioridad que en sentido religioso se tiene hacia la mujer no existe en la
Biblia, esta postura fue creada por uno de los más graves errores históricos de
interpretación del conocimiento religioso antiguo, convencidos para ello por la
estrecha relación que se tiene en la actualidad de la palabra mujer con el
género femenino. En el fondo se debe a la confusión originada por el doble
sentido con el que fue escrita la Biblia, al mezclar su sentido literal con su
oculto sentido numérico. En el primer sentido, al culpar a la mujer, a Eva,
ubicándola como hembra, de ser la causa de que el ser humano haya sido
“maldecido” por su pecado original, se está señalando la condición del ser
humano que por haber perdido su pureza le es posible crear únicamente por la
relación física de pareja. En el segundo sentido se está haciendo referencia a
lo que significaba ser mujer, representando a todo ser humano, masculino o
femenino, que perdió este nivel de desarrollo por haber perdido la pureza y
haber desarrollado la sexualidad, motivo por el cual ya no le fue posible crear
esencias, únicamente le fue posible procrear.
En el tiempo antiguo, el inmediatamente posterior a la pérdida de la pureza, el
hecho de tener relaciones sexuales era
equivalente a ser “pecador” porque significaba que se estaban terminando las
condiciones que sustentaban el predominio de la pureza, el equilibrio
planetario y el equilibrio del ser humano, en adelante el ser humano tendría
que luchar solo en contra de la adversidad, del implacable efecto del tiempo o
energía negativa creada por las nuevas condiciones del medio ambiente y de la
función del cerebro; evidentemente que no es posible dominarlo y las
generaciones vivieron en adelante cada vez menos tiempo. Es en estas
condiciones de inicio del cambio cuando se crea el simbolismo de Eva, conocida
ya como mujer adulta, con su número 8, el del universo, de nuestro universo que
es la tierra, pero sin mencionar el tiempo que permaneció previamente en ella
cuando aún era un paraíso habitado por seres humanos puros, donde el tiempo se
generaba con mucha menor velocidad que en el tiempo actual, en relación a la
cantidad de energía negativa producida, lo cual les permitía vivir por cientos
de años. Esto significa que Eva, la tierra, la madre de todos los vivientes,
fue “pura” mientras fue “niña” o era un
paraíso o sistema planetario joven y equilibrado, cuando le era posible sostener
la vida que en ella se desarrollara por medio de la creación de suficientes
energías vitales y sonidos equilibrados. Posteriormente, al ser la conocida
mujer “adulta”, se convierte en “pecadora”, porque es proporcional a un planeta añoso que induce
el desarrollo de la deformación tanto orgánica como mental de toda vida que en
ella se desarrolle debido a su creciente desequilibrio y déficit de energías
vitales.
Capítulo
2:23 Dijo entonces Adán: 13=4 esto es ahora hueso de mis
huesos y carne de mi carne; 82=10 ésta será llamada Varona, 27=9 porque de
varón fue tomada. 25=7 Total, 147=57=12, LA CREACIÓN DEL SER HUMANO DUAL
EQUILIBRADO.
El varón, su parte física, al crear y
sostener su parte espiritual, está creando y está sosteniendo a su Varona.
Varón y Varona representan la naturaleza original del ser humano dual, el
creado por este motivo en estado de equilibrio en perfección, proporcional al
árbol de la vida. Adán, # 20 la existencia o vida eterna, conjunta el total de
esencias con las que se creó todo lo que existe, incluyendo el 6 que permite el
equilibrio energético interno del sistema atómico y celular y el 12 del
equilibrio del organismo con el exterior mediante el desarrollo de los 12
conductos para la difusión de sentires puros y de energías vitales.
Capítulo
3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de
él, 84=12=3 serán abiertos vuestros
ojos, 24=6 y seréis como Dios, 13=4 sabiendo el bien y el mal. 35=8 Total, 156=66=12, EL INICIO DE LA PÉRDIDA DEL EQUILIBRIO EN
PERFECCIÓN.
Dios, al igual que el ser humano
equilibrado original, pueden conocer el mal, pero no pueden desarrollarlo
porque el sistema funcional de su mente pura y equilibrada no permite el
desarrollo de la energía negativa, son refractarios al posible daño de las
fuerzas del mal y al efecto de las energías alteradas o tiempo del medio
ambiente. La naturaleza de Dios y del ser humano equilibrado es similar en
relación a que ambos están formados por esencia, y por conciencia, la cual es
quien les permite, además de conocer el bien y el mal, crear mediante la
creación a voluntad de la diversidad de las esencias que forman parte de la
Cábala. Mediante esta facultad, Dios puede crear a su manera la existencia,
planetas y seres vivos; y a un ser equilibrado le permite sostener su equilibrio
y su pureza, y evolucionar en el desarrollo de los diferentes niveles de la Cábala;
lo cual es diferente a la condición de las plantas, las cuales por tener únicamente esencia,
reproducen por siempre la misma planta y el mismo fruto. La perfección orgánica
y funcional con la que fue creado el ser humano inicia a perderse cuando acepta
voluntariamente, por su conciencia, por su manera de pensar y de sentir, la entrada
de energía negativa, la cual por ser equivalente al tiempo, aumenta la edad
mental, hasta que el cerebro mismo es quien crea su propia energía negativa. El
factor tiempo también es producido por
nuestro planeta, cada vez con mayor velocidad, debido a su edad cósmica y a su
creciente desequilibrio, lo cual impacta directamente en la duración de la vida
y en el creciente desequilibrio orgánico, esto debido a que Eva, la madre de
todos los vivientes, nos impone, por ley de creación, por haber sido creada con
los mismos principios funcionales que el ser humano, el que tengamos un nivel
idéntico de perfección o de imperfección.
Capítulo
3:22 Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como
uno de nosotros, 72=9 sabiendo el bien y
el mal; 35=8 ahora, pues, que no alargue
su mano, 49=13=4 y tome también del
árbol de la vida, 40=4 y coma, y viva
para siempre. 20=2 Total, 216=36=9, número de hombre. LA PÉRDIDA DEL EQUILIBRIO
DE LA PALABRA.
El equilibrio, es la condición que tenía
la palabra para que pudiera cumplir con su función ejecutora o creadora. Esta
condición la tenía el ser humano equilibrado, nivel 12, el que era proporcional
al árbol de la vida. El ser humano equilibrado dominaba el conocimiento puro,
nivel 11, lo utilizaba para crear
sonidos equilibrados, mismos que desarrollaban su potencial activador
por medio de su palabra equilibrada. Al tornarse proporcional al árbol de la
ciencia del bien y el mal se pierden los niveles descritos previamente. Se
pierden porque la palabra se convierte en un mecanismo activo para crear e
introducir energía negativa al ser humano, eliminando paulatinamente, por medio
de este mecanismo, los niveles en Cábala con el que fue creado originalmente,
iniciando con la pérdida de la existencia o vida eterna, representada por Caín,
# 9, la palabra, matando a Abel, # 20, a su propia existencia. Otra enseñanza,
también muy importante, se manifiesta cuando Jehová dice: el hombre es como uno
de nosotros, sabiendo el bien y el mal. Se está revelando la existencia de más
de un Dios Creador, se está confirmando también, por el hecho de conocer el
bien y el mal, como así lo evidenció plenamente Jehová durante su actuación en
la Biblia, que ambos tienen conciencia. Estas observaciones son comprensibles
en la actualidad dado el avance del conocimiento astronómico y la popularidad
del conocimiento de los niveles de la mente, el haberse demostrado que el
universo está formado por miles de millones de sistemas planetarios, y que su
antigüedad se remonta también a miles de millones de años de antigüedad. Esto
significa que, para que haya sido posible se creara toda esta infinita existencia,
deben de haber participado varios Dioses Creadores, pero ha habido uno solo que
ha participado de manera conjunta con ellos, el cual es el Dios Creador Original,
el único creado a sí mismo para nacer con él
la existencia, el es el único que está formado exclusivamente por
esencia creadora, para así cumplir con su primer obra de creación, el dar con
sus esencias vida en perfección a los Dioses Creadores, los cuales si tienen
conciencia para cumplir con la función de crear y sostener la existencia.
Capítulo
5:2 Varón y hembra los creó, 20=2 y los bendijo, y llamó el nombre de ellos
Adán, 45=9 el día en que fueron creados.
47=11=2 Total, 112=22, LA ESENCIA MAYOR
DE LOS SONIDOS DEL EQUILIBRIO Y DE LA CABALA
Adán es una representación del primer ser
creado por el Creador Original a partir de la nada, de ahí el nombre de Adán, y
de Adanes porque fueron varios. Por ser ellos la primera manifestación de
creación por parte del Creador Original, su perfección es la más similar a la
del creado a sí mismo, también con capacidad para crear en perfección, para
crear la existencia, por ser ellos los Dioses Creadores.
El múmero22 es propio de un Creador, lo
alcanza cuando todas las esencias puras y equilibradas que sostienen lo creado
son parte de él mismo, hechas para que todo ser viviente las tome, para que
sostengan su nivel de creación.
Capítulo
3:13 Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: 31=4 ¿Qué es lo que has hecho? 41=5 Y dijo la mujer: 13=4 la serpiente me engañó, y comí. 29=11=2 Total,
114=24=6 LA PÉRDIDA DE LA ESENCIA DEL
SER HUMANO EQUILIBRADO, el despertar de la actividad sexual y la pérdida de la
condición de mujer.
Capítulo
3:14 Y Jehová Dios dijo a la serpiente: 24=6 Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre
todas las bestias y entre todos los animales del campo; 94=13=4 sobre tu pecho andarás, 25=7 y polvo comerás todos los días de tu vida.
52=7 Total, 195=15=6, DE NUEVO LA PÉRDIDA DE LA ESENCIA DEL SER
HUMANO EQUILIBRADO.
Al maldecir Dios a la serpiente está
maldiciendo el cambio de la función del eje de la vida, formado por la columna
vertebral, uniendo funcionalmente al cerebro y a los órganos genitales. En un
ser equilibrado, el que es proporcional al árbol de la vida, por este eje
circula la energía de la pureza, la que sostiene la vida. Al terminarse la
pureza, el cerebro y los órganos genitales se retroalimentan mediante una serie
de estímulos mentales y de impulsos sexuales. Esta función, perfectamente
normal para todo ser humano, quizá fue maldecida porque si no se ejerce
normalmente acelera la deformación mental y la pérdida de la pureza. Sobre tu
pecho andarás es una representación de nuestra columna vertebral, la cual vista
de perfil asemeja a una serpiente de cascabel erguida. La serpiente, por ser lo
más parecido a la columna vertebral, ha sido quien represente o simbolice religiosamente
y con sentido de repudio, el desarrollo de la sexualidad y de la maldad de ser
humano. Sin embargo, la columna vertebral es la misma en un ser puro o en un
ser impuro, la diferencia es el contenido de la energía que por ella circula.
Capítulo
17:5 Y no se llamará más
tu nombre Abram, 44=8 sino que será tu
nombre Abraham, 45=9 porque te he puesto
por padre de muchedumbre de gentes. 73=10
Total, 162=72=9, EL DESARROLLO DE LA PALABRA EQUILIBRADA O PALABRA DE
CREACIÓN.
Al cambiarle Jehová el nombre a Abram, #
36=9, la palabra equilibrada, cuando cumplió 99 años de edad, por el de
Abraham, # 45=9, se está añadiendo una A y una H, 1+8=9, para representar en
Abraham, 45=9, la palabra de creación, # 18. En sentido cabalístico un ser
humano es padre y es perfecto ante Jehová cuando ha recuperado el equilibrio de
su palabra, porque significa que a la vez ha recuperado el conocimiento puro
para crear sus propios sonidos equilibrados del universo, lo cual es
indispensable para evolucionar cuando se vive en planetas como el nuestro, el
cual ya no puede producirlos en la cantidad que el cerebro necesita. Los haría
chocando los sonidos de su palabra, # 9, con los sonidos del exterior, # 8, para
crear 9+8=17=8, los números de, muchedumbre, # 116=8, y de, gentes, # 72=9:
116+72=188=98=17=8. Es así como el patriarca Abraham representa en su nombre el
inicio de la enseñanza numérica para recuperar las esencias perdidas a través
del tiempo.
Capítulo
21:32 Así hicieron pacto en Beerseba; 24=6 y se levantó Abimelec, 20=2 y Ficol principe
de su ejército, 35=8 y volvieron a
tierra de los filisteos. 29=11=2 Total, 108=9, LA PALABRA EQUILIBRADA.
Pacto, # 58=13=4, y Beerseba, # 59=14=5, 4+5=9, los números de
Abraham. El sitio del pacto fue llamado Beerseba, # 59, por conjuntar los
números de Abimelec, #59=14=5, y de Abraham, # 45=9. En esta interpretación
numérica, al igual que en el versículo interpretado previamente, es notorio que
se trata de evidenciar, de la manera más sencilla posible, que la historia
religiosa bíblica fue escrita en dos sentidos, y además, que el sentido
numérico tiene una enseñanza muy profunda, superior a la del sentido literal.
En este versículo, por pactar dos fuerzas opuestas, para evitar posibles
combates y destrucción, da el sentido de cómo debe de ser la naturaleza del
proceso de choque de los sonidos equilibrados de la palabra para crear energía
activadora cerebral; lo cual es lo contrario a lo que sucedería si no hubiese
pacto, lo cual sería la manera como actúan los sonidos desequilibrados de la
palabra, principalmente los cargados de sentimientos negativos, emularían el
desarrollo de un combate, por la creación de energía negativa que ocasionaría
daño el cerebro.
Capítulo
22:10 Y extendió Abraham su mano, 27=9 y tomó el cuchillo para degollar a su hijo.
34=7. Total, 61=7 EL CAMBIO, número de Isaac, # 34=7, y de hijo, # 43=7.
En sentido literal Abraham padre, la
palabra, # 9, estaría a punto de asesinar a su hijo, # 7. Esta demencial prueba extrema de fe es
demencial, no es real porque no es posible que
la religiosidad tradicional pueda darle una justificación razonable a un
mandato de esta naturaleza. Este impactante drama religioso fue creado con esa
intención, para crear un antecedente inolvidable en los dos sentidos con los
que fue escrita la Biblia. En el sentido literal es una prueba de la fuerza con
la que fue moldeada la imposición de la dominancia religiosa, creada bajo la
seguridad de que la condición mental del ser humano, por ningún motivo puede
recuperar su pureza mediante el desarrollo del conocimiento puro, el
conocimiento de la verdad, y debe dominársele mediante la dependencia, la
adoración y los temores, como una medida para evitar que continúe deformándose
después de haberse perdido la pureza. En el sentido numérico, se elige el
sacrificio mediante el degollar para indicar el sitio donde se centra la
vibración del sonido de la letra G, la que significa el cambio, # 7. Este
sentido, el figurado, es la manera como se manifiesta el conocimiento puro,
corresponde a la manera como se escribió la parte enigmática de la Biblia. El
no conocerse la existencia de este
sentido es la causa de que durante milenios, la religiosidad continúe
sustentándose en dogmas. En sentido
numérico Abraham, # 9, es padre porque
la palabra es la esencia ejecutora, es quien crea nuevas esencias; e Isaac, #
7, es su hijo porque es el primer producto de creación de los choques de los
sonidos de la palabra, # 9, o sonidos del interior, con los sonidos del
exterior o del universo, # 8: 9+8=17=8, 8+8=16=7, el producto del choque de
sonidos equilibrados, que por activar al cerebro para producir los verdaderos
cambios se llama esencia del cambio.
Capítulo
26:4 Multiplicaré tu descendencia como las estrellas del
cielo, 49=13=4 y daré a tu descendencia
todas estas tierras; 31=4 y todas las
naciones de la tierra serán benditas en tu simiente, 71=8 Total, 151=61=7, EL CAMBIO.
Mediante la cantidad de descendencia como
las estrellas del cielo, estrellas, # 7, se está representando la infinidad de
choques de sonidos que se desarrollan a nivel interneuronal cuando el cerebro
es activado por los sonidos de la palabra, # 9, número de Abraham. Es activado
significa que la energía, por ser inmaterial, tiene la capacidad de penetrar
hasta las profundidades del sistema nuclear, el sitio donde se oculta el
conocimiento puro y se encuentran las energías que sostienen la vida, para que
así sea posible se estimulen y se efectúen los verdaderos procesos de cambio,
los tendientes a la recuperación del equilibrio del ser humano, mismo que lo
hará bendito. Multiplicaré, # 143=8, + estrellas, # 115=7= descendencia, #
87=15=6, la esencia del ser humano equilibrado. Multiplicación del número de
descendencia x el número de estrellas, 6 x 7= 42=6, los números de Jehová.
Capítulo
27:7 Tráeme caza y hazme un guisado, para que coma,
52=7 y te bendiga en presencia de Jehová
antes que yo muera. 71=8. Total,
123=33=6, EL SER HUMANO EQUILIBRADO. Coma, # 33=6. Bendiga, # 42=6. Jehová, #
42=6. Tráeme caza=17 + guisado, # 7= 24=6. Te bendiga en presencia de Jehová=
42=6.
La bendición es una representación de la
recuperación de la esencia del ser humano equilibrado. La intercesión del padre
y de Jehová es por el motivo de que para todo desarrollo mental y espiritual
siempre intervienen la guía de la familia, de las amistades, o de un maestro, y
principalmente del Creador. El desarrollo y la recuperación del equilibrio, por
las condiciones actuales, no es una tarea sencilla si se le compara con la
manera como se profesa la religiosidad común. Este conocimiento es un secreto
entregado desde los tiempos bíblicos al pueblo israelita, plasmado en su
emblema, en la estrella de David, originalmente en una forma hexagonal, correspondiente
originalmente a la figura que formaban las energías del exterior o universo que
nos rodea, y las energías del interior o universo ser humano, a nivel atómico y
celular, para que la energía de ambos se difundiera libremente en ambos
sentidos, para que fuera posible se sostuviera la perfección de la creación del
ser humano y de toda vida en el planeta. Cuando un sistema planetario está
equilibrado es cuando es un paraíso, porque puede crear suficientes esencias y
energías vitales para sostener la vida que en él se desarrolle. Esta vida, la
del ser humano, al estar igualmente equilibrado, puede captar estas energías de
manera natural como lo es el respirar por ejemplo. Este proceso es posible
porque las energías del exterior y las del interior se distribuyen para
fijarse, cada una en un punto, de los 6 puntos de la forma hexagonal, formando
de esta manera una configuración energética activa que cubre la superficie de
las formas circulares, la superficie de nuestro sistema atómico y celular. Este
sistema funcional perdido es la forma, en que coincide el conocimiento de las
culturas prehispánicas, que adquirirá la tierra cuando recupere su equilibrio,
es cuando se invertirá lo actual, la tendencia al desarrollo del mal, entonces
la energía, la luz, será una luz verdadera, entonces todo será bueno, nada será
malo, el ser humano recuperará también sus formas hexagonales. Dos de sus
puntos los formará la energía solar, otro la fuerza de la naturaleza, otro
sostendrá su vida, otro lo formarán la energía de los valores, todos sostenidos
a su vez por la energía de la palabra.
Capítulo
29:30 Y se llegó también a Raquel, 21=3 y la amó también más que a Lea; 34=7 y sirvió a Labán aún otros siete años. 31=4.
Total, 86=14=5, LA CREACIÓN DE LA FUERZA DE LA NATURALEZA.
Jacob, # 32=5, trabajó para Labán dos
períodos de 7 años, para representar los números de Raquel, # 77, representando
así la creación de la fuerza de la naturaleza, 7+7=14=5. Se presenta como que
era mucho el amor de Jacob para con Raquel, para que haya aceptado trabajar por
tanto tiempo para lograr el derecho a tenerla por mujer. Así es el deseo y la
voluntad que se requiere para desarrollar esta energía, la que por perfeccionar
el sistema celular, es la energía que interviene en los milagros de sanación,
la que previene y cura los padecimientos orgánicos.
Capítulo
32:28 Y el varón le dijo: 26=8 No se dirá más tu nombre Jacob, sino Israel;
49=13=4 porque has luchado con Dios y
con los hombres, y has vencido. 43=7
Total, 118=28=10, EL DESARROLLO DE LA PUREZA,
Porque has luchado con Dios y con los
hombres, 33=6, y has vencido, 10: Es la pureza, # 10, del ser humano, # 6,
quien lo cambia, 10+6=16=7. Israel, # 66=12, representa la recuperación del
equilibrio en perfección para un ser humano, un nivel de desarrollo que por
dominar también el conocimiento puro, # 11, y ser puro, # 10, tiene una
concepción clara y verdadera de la naturaleza de Dios y de la naturaleza de la
creación del ser humano. Al ser Jacob, representando al ser humano en general,
el que carecía de este conocimiento, debió de luchar contra la concepción que
se tenía de Dios y contra los hábitos religiosos de su tiempo, para que haya
sido posible haya sido él quien ejemplificara
la recuperación de un nivel, que por ley de Creación está preestablecido
pueda recuperarse hasta cuando se reequilibre nuestro planeta. Mientras, lo que
puede desarrollarse es un estado de preequilibrio, el que más se aproxime a la
naturaleza de la infancia, es el cambio que depende de cada persona desarrollar
para que puede facilitarse el poder cambiar al grado de perfeccionarse junto con el planeta.
Capítulo
34:25 Pero sucedió que al tercer día, 37=10 cuando sentían ellos el mayor dolor,
27=9 dos de los hijos de Jacob,
39=12=3 Simeón y Leví, hermanos de Dina,
40=4 tomaron cada uno su espada,
35=8 y vinieron contra la ciudad,
20=2 que estaba desprevenida, 20=2 y mataron a todo varón. 14=5 Total, 232=52=7, EL DESARROLLO DEL CAMBIO EN
SENTIDO NEGATIVO. Espada y mataron, 3+4=7. Vinieron contra la ciudad y mataron
todo varón, 34=7.
Los nombres de Simeón y de Leví, 5+10=15=6,
son elegidos para vengar la deshonra de Dina, porque igualan el número de
Siquem, # 6, número del ser humano, el violador, representando el desequilibrio
que ya imperaba desde esa época.
Capítulo
34:27 Y los hijos de Jacob vinieron a los muertos, 44=8 y saquearon la ciudad, 19=10 por cuanto habían amancillado a su hermana.
38=11=2 Total, 101=11, LA PÉRDIDA DEL
CONOCIMIENTO PURO. Los muertos, 3+8=11 La ciudad, 4+7=11 Por cuanto habían amancillado a su hermana,
38=11.
Las palabras revelan con toda claridad lo
que sucede cuando se pierden los niveles en esencia con los que fuimos creados.
Capítulo
35=8 Entonces murió Débora, ama de Rebeca, 40=4 y fue sepultada al pie de Bet- el, 36=9 debajo de una encina, 31=4 la cual fue llamada Alon-bacut. 22=4. Total, 129=39=12, número de ángel. LA PERDIDA
DEL EQUILIBRIO QUE ES SUPERIOR PARA UN SER HUMANO, # 12, Y DEL CONOCIMIENTO
PURO, # 11.
La muerte de Débora, # 47=11, y su
sepultura bajo una encina representan la pérdida del conocimiento puro en la
tierra, # 74=11. La encina fue llamada Alon-bacut, 43+49=92=11, porque los
árboles, y la encina en particular, tienen una estructura funcional integrada
similar a la empleada por el ser equilibrado nivel 12, para sostener su
equilibrio y su pureza y para crear el conocimiento puro. Por este motivo esta
función es representada al inicio de la creación con el árbol de la vida. Las
encinas trascendieron como objeto de adoración por los antiguos druidas, porque
tenían la capacidad, si crecieran ubicadas en puntos naturales de confluencia
de energías del exterior y de la tierra, de tomar estas energías y funcionar de
manera parecida a como lo hacía el arca de la alianza, de ser un contacto con
lo dimensional para tomar el conocimiento inmortal que se encuentra fuera del
tiempo. Por esta relación se eligió a la encina para representar la pérdida del
conocimiento puro. Pero la esencia de los árboles no es la misma que la del ser
humano, ellas si pueden conservar su función, y aunque existen muchos seres
humanos que tienen la capacidad para tomar su conocimiento, lo que faltaría es
el dominio del conocimiento de la Cábala para interpretarlo, ya que por su
complejidad, la interpretación del sentido numérico de la Biblia, por ejemplo,
resultaría ser un juego de niños.
Capítulo
41:19 Y que otras siete vacas subían después de ellas,
51=6 flacas y de muy feo aspecto,
35=8 tan extenuadas, que no he visto
otras semejantes en fealdad en toda la tierra de Egipto. 96=15=6 Total, 182=92=11, LAS CARACTERÍSTICAS DEL
CONOCIMIENTO DEFORMADO. Feo aspecto, 9+2=11. Extenuadas y fealdad, 5+6=11.
Se está representando al conocimiento
deformado, las vacas flacas, con características de monstruosidad.
Capítulo
41: 20 y 21 Y las vacas flacas y feas devoraban a las
siete primeras vacas gordas, 66=12=3 y
estas entraban en sus entrañas, 33=6 mas
no se conocía que hubiesen entrado, 46=10
porque la apariencia de las flacas era aún mala como al principio.
78=15=6
Total, 236=56=11, EL MECANISMO DE DESARROLLO DEL CONOCIMIENTO
DEFORMADO.
Durante la época en que inició a
desarrollarse el conocimiento deformado, cuando aún existía el conocimiento
puro, coexistieron ambos conocimientos en las mismas mentes. En estas
condiciones la fuerza del conocimiento deformado, las vacas flacas, ocasionó
que la mente impidiera el desarrollo y extinguiera el conocimiento puro, las
vacas flacas devorando a las vacas gordas. La cantidad de vacas eran siete para
señalar el cambio, # 7, negativo, imponiéndose al cambio, # 7 positivo.
Capítulo
41:24 Y las espigas
menudas devoraban a las siete espigas hermosas; 52=7 y lo he dicho a los magos, 24=6 mas no hay quien me lo interprete. 52=7 Total, 128=38=11, EL MECANISMO DE DESARROLLO
DEL CONOCIMIENTO DEFORMADO.
Ahora con espigas, se está representando
lo mismo que con las vacas flacas devorando a las vacas gordas.
Capítulo
41:26 Las siete vacas
hermosas siete años son; 42=6 y las
espigas hermosas son siete años: 36=9 el
sueño es uno mismo. 36=9 Total, 114=24=6 EL SER HUMANO EQUILIBRADO.
Los números de: las siete vacas hermosas,
24=6, + los números de: las siete espigas hermosas, 22=4, 6+4=10, representan
EL DESARROLLO DE LA PUREZA del ser humano equilibrado, # 6.
Capítulo
41:27 También las siete vacas flacas y feas que subían tras
ellas, 61=7 son siete años; 18=9 y las siete espigas menudas y marchitas del
viento solano, 45=9 siete años serán de
hambre. 30=3 Total, 154=64=10, LA
PÉRDIDA DE LA PUREZA.
Los números de: las siete vacas flacas y
feas, 33=6, + los números de: las siete espigas menudas y marchitas, 31=4,
6+4=10, representan LA PÉRDIDA DE LA PUREZA del ser humano.